Desde que no estas...

Se paro el reloj de mi existencia, y hoy enferma de imsonio y de arrepentimiento anhelo una oportunidad que no tendré. No ha pasado nada desde que no estas, mi vida es ahora más insípida, más sobria. Volvi a fumar, hay algo en hacerme daño que mitiga el dolor. Bebo para poder alcanzar un poquito de sueño, y la casa sigue a oscuras, solo una lámpara en mi escrito alumbra un libro de auto ayuda que no logro terminar de leer. Mi cuerpo ha caído en una especia de letargo eterno, y solo soy feliz con aquellas canciones que me recuerdan que no solo a mí me ha pasado esto. No quiero hablar, ni ver gente, ni oír ruidos, ni niños, ni risas, ni palabras de aliento…solo quisiera oír tu voz, pero le temo tanto a los reproches que prefiero recordar tu voz calmada que tan fría me dijo “por favor no me hables nunca mas”.

Perdón por haberte herido tanto. Perdón, porque tantas veces profese ser sincera y fui peor que todas las demás. Perdón por haberte causado tan gran vergüenza. Perdón por haberte humillado.

Aunque parezca todo lo contrario, de verdad TE AME mas que nada en el mundo.

Lo siento.